Archive for the ‘De mi vida’ Category

Complejos, prejuicios y demás familiares…

junio 28, 2019
Imagen de penanolen.cl

Una de las palabras más en boga del presente siglo que ya se acerca a su primer cuarto es sin duda alguna, inclusión e increíblemente, a pesar de que soy un abanderado de la inclusión, entiendo que esa frase es comúnmente mal utilizada, trayendo como resultado el efecto contrario a la razón de su origen.

Hemos utilizado la palabra inclusión confundiéndola con igualdad, con derechos fundamentales, sin darnos cuenta de que con ello contribuimos a crear complejos, a crear prejuicios, a crear limitaciones, pero sobre todo a pensar como la posible cura a males que están muy alejados de la aceptación de terceros.

Yo creo en la promoción de la inclusión, pero creo que esa hornada debe ir acompañada del fomento de la autoestima, del autodesarrollo, de la auto aceptación, de la idea de que el mundo no está contra nosotros, sino de que el mundo es libre, complejo, competitivo y que las sociedades se autorregulan, así como aquel ejemplo en las clases de economía de la “mano invisible” que regula.  En un mundo tan espasmódico, presto a confusiones y excluyente necesitamos ir más allá que la simple palabra.

Racismo, clasismo, género, entre otros no menos importantes, son factores de nuestros días para reclamar inclusión, pero atacamos problemas, reales por demás, olvidando que las soluciones son compartidas, creando una víctima y un victimario, enfrentándolos, fomentando el odio, intentando castigar al victimario y aumentando la debilidad de la víctima al hacerlo merecedor de lastima y favor, incluso de la asistencia pública.

Con eso olvidamos muchas cosas y erramos.  Erramos en que convertimos a personas en víctimas de sí mismas, mas que ser víctimas de un sistema, entendemos que quienes los excluyen son los culpables de su pena, y fomentamos una oposición, consciente o inconsciente, sin darse cuenta de que con ello le quitan fortaleza y razón para desarrollar las cosas que los hacen más similares.  En pocas palabras los llenan de complejos, de prejuicios y de limitaciones haciéndoles entender que necesitan la asistencia para lograr un poco de espacio y en otros casos haciéndoles entender que están condenados a la desgracia, aquella desgracia que ha fabricado quien los excluye.

Como dije al inicio de este escrito, soy un abanderado de la inclusión, más aún, soy un abanderado de la igualdad, pero soy un acérrimo critico y enemigo de los complejos,  y si bien es cierto que he sido víctima de alguna que otras cosas de ellas, siempre entenderé que nuestro peor victimario podemos ser nosotros mismos al sentirnos merecedores de lastimas sintiéndonos inferiores o al sentirnos merecedores de pleitesías sintiéndonos superiores, primero somos humanos, luego todo lo demás…

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Esencia

noviembre 30, 2016

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Recordando una clase de la materia de Sociología en mis años de estudiante universitario, existe una teoría que sostiene que, las personas, al igual que las plantas, y demás seres vivos, no eligen dónde ni cómo nacen, sino que esto es un asunto de destino o suerte.  Esta tesis se encuentra sustentada en la ciencia, por tal razón se aleja de toda lógica cristiana donde si mencionamos, por fe, los planes de Dios para cada uno de nosotros.

Tomando en cuenta lo anteriormente explicado, cada persona tiene condiciones completamente diferentes al nacer y desarrollarse, algunos mejores circunstancias y condiciones, otros peores, así pasa a todos habitantes del mundo.  Algunos tienen la oportunidad de forjar su propio destino y lo hacen, otros tienen el destino prácticamente forjado y lo desperdician, en fin, según mi perspectiva, nadie es responsable de cómo llega al mundo, pero la mayoría de personas son responsables de cómo terminen en él y digo la mayoría, porque hay un porcentaje sustancioso que no alcanza a adquirir responsabilidad en sus actos ni en su destino.

Algunos consideran que, haber nacido en condiciones ventajosas en todo el sentido de la palabra, les faculta para tomar decisiones sobre los demás, decisiones en referencia a las vidas de otros y para verlos con la rabiza del ojo, siempre considerándolos como seres inferiores. Sin embargo en el otro extremo de la cancha, otros consideran que, el haber nacido en condiciones desfavorables, en todo lo que esa frase signifique, les faculta para ser foco de lastima y para entender que es una obligación de los demás compadecerse de su situación, incluso si en el tiempo logran superar su desdicha, entienden que el resto del mundo les debe pleitesía a su superación y que eso les hace merecedores del respeto y la consideración de los dichosos y los desdichados, sobre todo para ser aceptado por los dichosos como alguien similar pero aventajado por el costo de la superación.

Mi propia concepción sobre el tema, como fruto de la observación y el análisis del comportamiento, me lleva a concluir que estoy en cierto acuerdo con la teoría mencionada en la introducción, pero que lo favorable o lo desfavorable de la situación con la cual hayamos venido al mundo y heredado, no es lo que debe regir nuestras vidas, más allá, creo que lo que nos puede hacer diferentes es lo que logramos hacer en esa condición que nos tocó, es lo que podemos hacer por nuestros propios medios. Entiendo también que es un tema de oportunidades en todo el sentido de la palabra.

Cultivar la sencillez de corazón, es ver la vida desde su óptica real, pues nada trajimos al mundo y nada habremos de llevarnos.  Por eso, sería un grave error considerar lo que somos sobre la base de, lo que tenemos, creemos tener, o a aquello de lo que carezcamos, y no a lo que somos en sí mismos.

Imagen, gracias a https://reikicris.com/

Profesiones y Profesionales

mayo 5, 2011

Profesionales y Profesiones

Siempre he sido un crítico de aquellas cosas que no encuentro correctas, con eso no quiero decir que yo sea perfecto, ni que yo no cometa errores ni mucho menos, pues que tire la primera piedra quien este libre de pecados, pero hay cosas que están a la vista y no necesitan espejuelos para llamar la atención.

Hay tres profesiones en las que, quienes la ejercen, deben ser personas a quienes les “pese el ruedo de los pantalones o la costura de la falda” como dicen en el lenguaje urbano, eso significa que hay que tener un mínimo de ética, “dos dedos de frente” para ser Médico, Profesor o Abogado.

¿Por qué afirmo lo anteriormente expuesto? Por la sencilla razón de que para ejercer cualquiera de estas tres profesiones se necesita tener sobre todo vocación en el mismo grado que capacidad para realizarlo, pues no me vale saber mucho y no poner a disposición de quien necesita esa capacidad.

Recuerdo de niño, una huelga que hicieron los maestros de escuelas públicas, y me dio mucha pena ver como los estudiantes de esos recintos estudiantiles perdieron el año escolar, gracias a que sus maestros valoraron más su paga que el retraso que les estaban causando en los años de escolaridad.

Es común que en las clínicas de la República Dominicana y (según he visto en televisión) muchas partes del mundo los médicos anteponen los intereses económicos antes de la salud de una persona, normalmente se interesan más en saber quién va a pagar la cuenta que en cómo van a sanar al paciente (que de hecho hay que ser muy paciente para sobrevivir ante esa situación). Si no tienes seguro, entonces debes depositar una fianza para poder intentar ayudarte.

Lo mismo con la parte de los juristas, aunque seas inocente en una sociedad como la nuestra, solo saldrá libre si y solo si tienes los recursos económicos para pagarle a quien te ayude a demostrarlo. Es injusto, a veces con tan poca cosa se podría defender a un inocente, sin embargo en la mayoría de los casos el culpable sale libre porque si tiene los recursos suficientes para buscar a quien pruebe lo contrario o utilice dichos recursos para poner la “justicia” a su favor.

No digo que quienes ejercen esas profesiones no tengan que anteponer su paga, pues para eso decidieron dedicar sus vidas al ejercicio de una profesión digna como son cada una de estas, sin embargo a lo que me estoy refiriendo con lo escrito es que no debe ser lo primero, no debe ser lo único, no debe ser lo más importante.

Siempre que llego a un aula de clases, al hacer mi presentación digo lo siguiente: Cuatro razones básicas me motivan a estar en esta aula impartiendo docencia, la primera de ellas es que me gusta hacerlo, amo lo que hago, disfruto bastante enseñar. La segunda, entiendo que tengo un compromiso de compartir lo aprendido, es decir tengo compromiso con mi generación y con las que siguen, con la sociedad en su conjunto de trasmitir los conocimientos adquiridos. La tercera es que parte del compromiso a parte de trasmitir los conocimientos es corregir los que he visto que otros no han hecho bien, entiendo que la mejor forma de propiciar el cambio es siendo parte de él, pues si quiero ver que las cosas cambien, debo ser el primero en tomar iniciativa. La cuarta razón es que trabajo en eso y así como trabajo en eso, merezco paga, pues el trabajador merece su paga y mi tiempo y capacidad de servicio tiene su precio, aunque en el mismo orden que acabo de exponerlo, es decir entre mis prioridades es la número cuatro, pues siempre he demostrado con hechos que las otras tres están antes.

MI FILOSOFIA DE VIDA

febrero 3, 2011

 

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Entre las muchas definiciones que tiene la palabra filosofía, una de ella es la de expresar la manera de pensar o ver las cosas, también es usada para definir el sentido de obrar de un ser humano. No me gusta mucho la lectura temática de autoayuda, sin embargo uno de los mejores libros que he leído se llama “Mi filosofía del triunfo” del otrora estrella del mejor basquetbol del mundo Michael Jeffrey Jordan. En ese libro de bolsillo, Jordan, destaca los elementos que le permitieron convertirse en el mejor del negocio. Desde entonces, he entendido que se necesitan tener políticas de vida, formatos, reglas que indiquen o encaucen el pensamiento de las personas en la toma de decisiones.

DIOS todo poderoso nos creo a su imagen y semejanza, y nos dio el poder de elegir, de sobre pasarnos, de ser limitados y de ser ilimitados, nos dio la libertad de elección. A pesar de que podemos hacer de todo, no todo conviene, por tal razón hacen faltas los patrones de vida. Por eso basado en el uso de mis ideas y en las costumbres que he adquirido en el camino de mi vida. Puedo decir que estos son algunos de los principios que han guiado mi filosofía de vida, sin que tengan orden de importancia en específico y siendo una lista enunciativa mas no limitativa ni exclusiva:

– Creo en DIOS sobre todas las cosas, a veces quiero expresarme sobre ese tema, quizás algún día lo haga, pues la imagen que yo tenía de DIOS aquella con la que crecí, ando tratando de recuperarla, pero creo en Él, creo en la Biblia, creo en el Espíritu Santo, creo en Jesús y en el poder de su crucifixión y resurrección y no cambio esa creencia por ninguna otra aunque creencia que me quieran inculcar. Sé que DIOS está en el cielo o en cualquier lugar y sé que algún día tendré que rendirle cuentas.

– Tengo un alto concepto de la amistad. Soy amigo de los amigos, cualquiera diría “obviamente, no sería amigo de los enemigos”, sin embargo lo que trato de trasmitir en esta frase es que en la edad que tengo no le he fallado a ninguno de mis amigos, nadie puede decir a la fecha que me necesitó y yo no estuve. Creo que después de la familia, los amigos son los seres más importantes del mundo, los valoro y los aprecio en su justa dimensión, aunque no me han correspondido en esa misma forma. Uno no elige a la familia, pero si puede elegir a los amigos, no obstante a veces hacemos muy malas elecciones y yo he elegido mal muchas veces.

– Las mujeres de mis amigos son invisibles, siempre lo han sido, respeto a mis amigos y en ese sentido sus amores, por eso desde que tengo abierto el sentido de responsabilidad nunca me he enredado con intereses amorosos de mis amigos.

– Soy enemigo de toda la hipocresía, nunca he sabido disimular ante una persona que no soporto ni mucho menos soportar a personas que tienen dos caras. Esta frase la oí por primera vez en la canción “El Filosofo” de Vico-C, desde entonces la hice mía, pues me identifico plenamente con ella.

– Valoro y respeto a las personas por lo que son, personas, no por lo que tienen, pueden o representan. Tengo la creencia de que todos somos iguales ante DIOS que lo que tenemos o dejemos de tener es cosa de esta vida y que muchas veces el ritmo de nuestras vidas cambia, a veces estamos arriba otras veces estamos abajo, muchas veces tenemos de sobra y otras tantas se nos escasea todo. La vida da vueltas, un día estamos de un lado otro día estamos del otro, quizás a quien hoy ves cortado, mañana es quien puede curarte.

– No me creo mejor persona que nadie, pero tampoco creo que soy el peor de todos, simplemente soy yo, DIOS me hizo como soy, si cumplo o no sus expectativas, si las tiene o no de mí es algo que solo Él puede definir. En cuanto a las cosas de aquí, no me gusta ser comparado

– Tomo alcohol en varias de sus presentaciones, pero acostumbro a tomar por compartir, no a compartir para tomar. O sea, el móvil de salir con mis amistades, o de visitar un expendio de bebidas alcohólicas no es embriagarme sino más bien disfrutar del ambiente, de lo que estoy haciendo, y con ello me «doy los traguitos», sin embargo, difícilmente se me ve en mi casa tomando o sentado solo en un bar, pues no bebo por beber sino dentro del compartir, por eso trato de no tomar dos días seguidos en una semana a menos que no sea un fin de semana.

– Entiendo bien claro que mis problemas son mis problemas, entonces no tengo por qué estar atormentando a otros con ellos, participo muy poco mis penas, no tengo muchas personas con quien desahogarme, pues soy muy cuidadoso con ese tipo de acción.

– No libro batallas sin sentido, es decir, si estoy seguro de que voy a perder, no tengo por qué pelear, sino no tengo la menor posibilidad de éxito, no pierdo el tiempo.  No es necesario estar tirando golpes a ciegas, y no me refiero a peleas ni a golpes físicos.

– No me gusta despojar a nadie de su valiosa dignidad. O sea, en una batalla solo lucho de manera implacable hasta ganar, luego de ahí no tengo porque humillar, como se pedir perdón, también se concederlo.

EL SEGUNDO o EL NUMERO 2

junio 14, 2010

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Hace un tiempo escribí un post sobre la importancia relativa de ser el primero en cuestiones del amor, EL PRIMER NOVIO, EL PRIMER AMOR, EL PRIMERO EN HABER HECHO EL AMOR, EL PRIMERO EN BESAR, etcétera. Frente a estas controversias yo no tengo respuestas, tampoco las tuvieron aquellas personas que comentaron dicho post pues nadie dejó satisfechas las preguntas que se hicieron.

Revivo ese escrito, porque hace mucho que tenía deseos de escribir el presente sobre el segundo, pues existen muchas canciones que contradicen varias de las leyes inmutables del marketing que siempre se refieren a ser el primero, por lo menos en cuestiones del amor hay canciones dicen cosas que favorecen al segundo y las chicas que a quienes he consultado para escribir esta entrada coinciden con esos artistas. Por ejemplo:

 

Dice Pedro Arroyo:

De acuerdo él fue el primero que te amo antes que yo, y que bebió de tu vida el primer sorbo de amor, de acuerdo que conquistara por primera vez tu piel, pero fue solo deseo y no te llegó que querer.

Yo fui el segundo en tu vida pero el primero a la vez, él se llevo tu inocencia, pero yo te hice mujer…yo fui el segundo en tu vida pero el primero en amor, el que te abrió con caricias y el que más te conoció….

A él le falto la ternura, fue torpe con tu amor por el deseo de saciarse, jamás de ti se acordó yo te borre esa tristeza, que al marcharse te dejó

Dice Tito Gómez:

No importa si fue el primero, ella es mi vida y así la quiero. Busque busque otro consuelo, lejos muy lejos de mi suelo. Si usted la enseño a besar, si de amor la hizo llorar, ¿Por qué hubo de abandonar si pensaba regresar?

 

Dice Tony Vega:

Contigo aprendió de la piel, conmigo se sintió mujer, tú despertaste en su cuerpo pasión, yo le enseñe a descubrir el amor, lo tuyo fue algo tan personal, fue recibir pero muy poco dar, lo mío fue romper aquel esquema y darle un sitio como compañera… por eso ahora está conmigo, porque le di algo más, una razón para vivir, una esperanza al despertar, he llenado aquel vacío de esa huella de tu adiós, le puse alas a sus sueños y abrigué su corazón.

 

Lo cierto es que existe y siempre existirá la controversia de lo bueno de ser el primero y lo malo de ser el segundo, sin embargo lo que he visto en la vida es que no importa el lugar que uno ocupe, lo que siempre importara es saber ocupar ese lugar, no importa ser el primero si el sucesor sabe borrar esas huellas, no importa ser el segundo si el lugar dejado por el primero te quedara pequeño. Lo que importa y siempre será importante es dejar huellas firmes imposibles de borrar por quien te suceda, lo que importa es saber borrar aquellas huellas de quien estuvo antes que tú. Se es el segundo por asuntos de tiempo, pero muy pocas veces se es el segundo por razones de gusto o de preferencia. Al final no importa el número sino su accionar.

LA FELICIDAD: REALIDAD O QUIMERA

noviembre 9, 2009

 

En una ocasión hablaba con una persona y me pregunto que cual era mi mayor deseo en la vida. La realidad es que para ese momento me quede pensativo y muchas cosas importantes me vinieron a la cabeza, pero no encontré entre todas ellas, algo verdaderamente valedero y sincero a mis sentimientos que se pudiera identificar como mi mayor anhelo, entonces me quedé sin respuesta para esa pregunta.

De inmediato procedí a preguntarle lo mismo y para poca sorpresa a mi persona, me respondió que lo que más deseaba era ser feliz. En seguida exclamé internamente, ¡pero claro, eso me pasó por la mente! Sin embargo no quise dar esa respuesta porque la felicidad para mí es una quimera, simplemente una utopía por la cual debemos luchar, pero conscientes de que no la vamos a alcanzar.

He escuchado a muchas personas decir que se sienten feliz, pero nunca he escuchado a nadie decir SOY FELIZ, para alcanzar la felicidad hace falta tenerlo todo o por lo menos entender que lo tienes todo con lo que realmente tienes. Cuando digo tenerlo todo, no necesariamente me refiero a las cosas materiales, sino también a las espirituales, a las físicas, a las que se ven y también a las que no se ven. La felicidad no es sinónimo de la conformidad, sino de plenitud, es algo más profundo, es tener una vida sin huecos, sin lagunas, sin vacios.

La felicidad guarda mucha relación con la perfección, con la cercanía a DIOS, con la paz con sí mismo, con la no necesidad de nada. Cuando digo que es una quimera o una utopía, lo digo porque realmente debe ser el fin que persigamos, la meta misma, pero debemos estar muy, pero muy conscientes de que es casi seguro que nos pasemos toda la vida persiguiéndola, en esa persecución encontraremos muchas cosas interesantes y careceremos de muchas otras, precisamente eso es lo que hace la vida atractiva mientras encontramos la felicidad.

La felicidad es para perseguirla, no para encontrarla por lo menos, no en esta vida. Podremos alcanzarla en un estado y carecer de ella en otro, pero plenamente siempre estaremos persiguiéndola, siempre nos hará falta algo que la complemente, no importa cuántos libros de auto ayuda hayamos leído. Eso es lo que nos permite abrir los ojos cada mañana y luego de dar gracias a DIOS, prepararnos para un nuevo día, para una nueva persecución, para una nueva búsqueda. Es posible que lleguemos a la noche sin encontrar lo que salimos a buscar, pero nos sentiremos bien con lo cerca que estuvimos de hallarla y eso nos permitirá volver a tener un despertar similar.

Cuidado con la percepción

agosto 2, 2009

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Las apariencias engañan

Cuando escuchamos o leemos esa frase, regularmente, entendemos que es en alusión a algo feo que tiene algo bonito por dentro o a algo que se ve arruinado por fuera pero que por dentro está muy bien, en fin siempre que leemos esta frase nuestro subconsciente registra que lo de adentro esta bien y que lo de afuera no o que lo de afuera esta bien y lo de adentro no, siempre contraste, pero casi nunca registra que puede existir un al traste.

Para hablar de una persona y decir que las apariencias engañan, deben darse algunas cualidades, por ejemplo que la persona sea fea y de agradables y dulces sentimientos, que la persona parezca desagradable y sea agradable o que la persona parezca una dulzura y sea un diablito.

Todo este preámbulo, para decir que muchas veces nos fijamos en la apariencia exterior de la persona y aun luciendo muy bien, esa apariencia exterior nos aleja de conocer la parte interior, que en la mayoría de los casos es más importante que la exterior.

Es normal que en el caso de los hombres, la atracción por las mujeres comience por los ojos, por la parte física, pero el problema es cuando por ahí termina, es decir cuando sólo eso es suficiente, pues todo quedará en una atracción, todo será ilusión y se irá con tiempo, con poco tiempo.

Es algo injusto evaluar y calificar a las personas por lo que se ve de ellas, pues muchas veces nos quedamos viendo lo que todo el mundo ve y perdemos la oportunidad de descubrir lo más interesante, lo que está por dentro. Siempre he estado claro con que lo que se ve se pierde y cuando se pierda sólo te quedará lo que no se ve. Si te enamoras perdidamente de una mujer por todo lo que su físico te ofrezca, lo disfrutaras, pero cuando ese físico se haya ido, no tendrás nada más que buscar en ella.

Muy por el contrario ocurre cuando se complementa lo de adentro con lo de afuera, pues después de que los años hayan pasado todavía habrá mucho que encontrar.

Más aun, siempre habrán cosas interesantes, pues lo físico sirve para lograr la exhibición y llenar nuestro ego, para devorarlo con todas las fuerzas de la carne, pero lo espiritual, lo intelectual, lo que es intangible eso es lo que nos conduce a la verdadera felicidad, a aquellas cosas que disfrutamos hasta más allá de los años, hasta más allá de la distancia, hasta más allá de la carne, hasta más allá de las arrugas, hasta más allá de lo que alcanza nuestra mirada…

33

mayo 18, 2009

Entre nostalgia y nostalgia Entre tu vida y la mía Entre la noche y el alba Se van pasando los días.

 

Quién no recuerda esa edad Llegados los dieciséis Cuando queremos tener Algunos años de más.

 

Y quién no quiere ocultar. Un poco el tiempo de ayer. Cuando se empieza a encontrar. Alguna arruga en su piel.

 

Treinta y tres años Nada más son media vida. Treinta y tres años. Que se van con tanta prisa.

 

Treinta y tres años. De querer a quien lo pida Treinta tres años Como yo, quien lo diría.

 

 

A veces miro hacia atrás Con la nostalgia que da El recordar esa edad Cuando se juega a ganar.

 

Y hoy si quiero apostar Me toca tanto perder Y es que el amor tiene edad Aunque no lo quiera usted.

 

 

Al parecer la edad de 33 es muy especial para algunas personas, en especial los artistas, Julio Iglesias le dedicó una canción a esa edad y Luis Miguel le dedicó una producción completa.

 

Con la gracia de DIOS he llegado a esa edad, no sé si mejor de lo que esperaba estar para esta época o mejor, lo cierto es que ya tengo 33.

 

No sé si he podido ser mejor o si he podido ser peor, pero ya tengo 33.

 

No sé si me queda por vivir tanto tiempo como el que ya he vivido o si me queda más de ahí, no lo sé, sólo sé que tengo 33.

 

No sé si es la mitad de mi vida o que pasará mañana, pero tengo 33.

 

Como dice una canción del Gran Combo Ha llegado el momento, de sentirme contento por todo el bien que he hecho y también el momento de mi arrepentimiento por todo los errores que he cometido.

DECISIONES

abril 26, 2009

Decisiones

Las decisiones que tomamos a diario siempre nos afectan, bien sea en nuestro futuro inmediato otras afectan nuestro futuro de una forma un poco mas tardada.

Muchas veces me pregunto que hacer, si al tomar una decisión que afecta mi futuro inmediato de manera positiva y no crea un efecto definido sobre mi futuro o si afecta de manera negativa al presente inmediato y desconozco su efecto al futuro lejano.

En esta semana vi dos películas, ambas policiales, pero me llamo la atención que en una de ellas American Gangster la ex esposa de un policía que no acepta sobornos le reclama diciéndole que el hecho de que el sea un policía insobornable no lo califica como un hombre bueno, pues el hace muchas cosas malas. En otra película Rápido y Furioso, le dice una ex amante al policía encubierto quizás no eres un bueno disfrazado de malo, sino que realmente eres un malo que vive disfrazado de bueno.

Ambas mujeres tenían razón con lo que decían, ambas calificaban de malos a aquellos que se sentían ser buenos, por algunas acciones que ejecutaban sobre los malos, así es nuestra vida, y así son nuestras decisiones. A veces tenemos un código de ética que consideramos inviolable para algunas cosas, sin embargo no aplicamos un código similar para las demás.

Yo me pregunto, ¿Qué se debe hacer entonces? Tomando en cuenta que él hacía muchas cosas  ¿El policía debía dejarse sobornar? ¿Es necesario limitar nuestras buenas acciones teniendo a cargo las malas que están alojadas en nuestra memoria? ¿Debemos tomar decisiones en contra de lo correcto basadas en la poca incidencia que tengan en nuestro futuro?

La realidad es que se torna difícil encontrar respuesta a cada una de estas preguntas, siempre y cuando exista en nosotros el punto luminoso de querer hacer las cosas bien hechas, aunque en alguna o algunas áreas hayamos fallado, pues si hacer el bien está reservado para los perfectos, entonces ningún humano estaría capacitado para hacerlo…

NO ESTABA MUERTO…

diciembre 28, 2008

Al amigo Pablo Herrera le pagaron su salario y sin pensarlo dos veces se fue a tomar unos tragos, duró una semana de fiesta y perdió el conocimiento, como no volvió a su casa, todos lo dieron por muerto…

Al cabo de algunos días, de haber desaparecido, encontraron a otro muerto, un muerto muy parecido. Le rezaron la novena y le “hicien” un gran velorio, le perdonaron sus deudas y a todos les daba pena…

Pero un día se apareció lleno de vida y contento, gritándole a todo el mundo ¡se equivocaron de muerto! El lío que se formó eso si no es puro cuento, su mujer ya no lo quiere, no quiere dormir con muertos…

No estaba muerto no, no estaba muerto… No estaba muerto no, no estaba muerto. Andaba de parranda…

No estaba muerto no, no estaba muerto… No estaba muerto no, no estaba muerto. Andaba de parranda…

No estaba muerto no, no estaba muerto… No estaba muerto no, no estaba muerto. Andaba de parranda…

Esta es la versión cantada por un cantante de merengue llamado Ravel, en los años noventa, siempre me llamaba la atención y desde aquel entonces me la aprendí.

También la puse en este post en alusión a una respuesta que merecen mis lectores, que han estado preguntándome por varias vías de comunicación que si este espacio se iba a cerrar o algo parecido, como se había hecho ya una moda, pues nadie se extrañaría si yo dijera que si. En ese mismo orden de ideas espero que nadie se extrañe de ver no, pues no pienso cerrar este blog.

Estoy de regreso, sé que algunos lo dudaron pero como se dice en el lenguaje urbano “Toy pá trá”…

Quiero aprovechar para desear un prospero año 2009 a todos mis amigos y a cada persona que lee o ha leído este blog, en especial a aquellos que han dejado sus huellas en algún comentario y se han ocupado en preguntar por el dueño.

El próximo año venimos con cosas nuevas, por lo menos eso esperamos…